
El peso muerto convencional es uno de los ejercicios rey en las salas de entrenamiento.
Éste se utiliza tanto para mejorar la fuerza como la masa muscular (aunque en este segundo caso no sea tan efectivo) y por ello es necesario controlar la técnica.
Primero veamos cuales son los grupos musculares principales implicados en el mismo.

Músculos implicados en el peso muerto convencional.
Aunque en la imágen hay bastanes músculos sin colorear, creedme, se activan todos dadas las demandas del ejercicio y las altas cargas que se suelen manejar, por ejemplo, el dorsal ancho se activa para aproxima la barra a la pierna lo máximo posible y evitar que se genera mayor carga de la necesaria en la espalda baja.
Otra musculatura que también se activa es el bíceps braquial e incluso el tríceps braquial, ambos se activan para generar fuerzas de tracción y evitar que la carga separe ambos segmentos del codo, funcionan como estabilizadores.
Como verás, en este ejercicio, cada músculo tiene una acción, por ello es necesario entender cuales son los movimientos principales que se generan en el mismo.

Secuencia del peso muerto convencional.
Como podrás observar, hay tres articulaciones en las que se centra el movimiento: tobillo, rodila y cadera.
El torso se ve implicado con el objetivo de soportar la carga externa (la barra y los discos).
En las tres articulaciones mencionadas anteriormente, las fuerzas que se generan son de flexión por lo tanto los músculos que se activan son los extensores, produciendo así una triple extensión.
Seguramente el concepto “triple extensión” te suene de la sentadilla, así es, pero ambos aunque no comparten ciertas características y factores, poseen el mismo patrón motor en común.
Por todo ello, hemos preparado un tutorial en el que aprenderás en menos de 10′ los fundamentos básicos para poder realizar el peso muerto de manera eficiente, mejorando tu rendimiento y reduciendo el riesgo de lesión.